¿Qué hacer con la ansiedad?
Si bien la ansiedad es una respuesta adaptativa frente a situaciones de amenaza o peligro -que incluye diversas emociones asociadas- no es saludable sentirse así todo el tiempo.
Algunos de los síntomas de la ansiedad son taquicardia, mareos, dificultad para respirar, sudoración de manos, sensación de inseguridad, temor o retraimiento social y dificultad para conciliar el sueño, entre otras.
Cuando estos síntomas son sostenidos en el tiempo y comienzan a limitar o entorpecer nuestro funcionamiento habitual, es que debemos buscar ayuda. Si te estás sintiendo así, te puede ayudar:
- Reducir el contacto con las tecnologías: el exceso de redes sociales, correos, entre otros, nos mantienen en alerta y no nos permiten relajarnos.
- Planificar el tiempo: elaborando un calendario mensual con fechas importantes, tareas que no se deben olvidar y actividades familiares. Hacer el ejercicio de verlo todo los días permitirá una mejor planificación y anticiparse a distintas situaciones.
- Cuida tu alimentación: regula la ingesta de sustancias como el café, cigarros, alcohol, analgésicos y drogas, ya que sus efectos pueden jugar una mala pasada.
- Mantener vínculos cercanos y conversar acerca de lo que te ocurre.
Saber identificar la ansiedad y estar atentos a sus síntomas puede ser de gran ayuda para que no se transforme en un problema. Es importante tomar medidas que nos protejan y -en caso de ser necesario- pedir ayuda para encontrar mecanismos que nos permitan manejarla.