Ya sea un cliente, colega o jefe, que la gente te considere alguien agradable es algo que se discute poco en el mundo profesional. La realidad es que las personas que son percibidas como más agradables, son también las que reciben más apoyo: sus mail son contestados con mayor frecuencia, sus comentarios con mejor recibidos en las reuniones y reciben mayor retroalimentación positiva al evaluarse su desempeño.

Existen estrategias de lenguaje corporal que sirven para influir positivamente en otros y estas son algunas:

Sé un espejo de los movimientos del otro: la neurociencia establece que las personas se sientes más cómodas con otro cuando este se mueve como espejo de sus movimientos. Se conoce como sincronía límbica y realmente funciona.

Debe hacerse de forma natural, no como un mimo, pero es útil imitar los movimientos del interlocutor. Por ejemplo si el otro toma agua de su vaso, hazlo tú también, o si pone los brazos de cierta forma, esto también lo puedes hacer. Es importante no exagerar, sin embargo, se debe tener presente que esta es una forma sencilla y poderosa para entrar positivamente en una interacción.

Practica un saludo dando la mano de forma firme pero flexible: La primera impresión es fundamental y un saludo “flojo” instantáneamente genera una sensación incomoda. Especialmente si te dedicas a las ventas o tienes que conocer mucha gente por tu trabajo, practica un saludo firme pero flexible.

Haz contacto visual cuando saludes a alguien: los seres humanos generan interacciones positivas con quienes tienen contacto visual. Desviar la mirada, especialmente cuando se está conociendo a alguien, puede ser particularmente dañino para esta interacción; puede ser interpretado como falta de respeto o desinterés. Por otro lado, el contacto visual comunica confianza e interés en el interlocutor.

Respira profundamente: el ser humano se sintoniza con los sistemas nerviosos que lo rodean, entonces mientras más relajado estés, más relajado estará el sistema nervioso de tu interlocutor, y será más fácil crear una interacción positiva.

Una simple forma de relajar tu sistema nervioso es respirando profundamente, por ejemplo, toma aire por cuatro segundos, y bótalo en ocho segundos, esto te ayudará a relajarte y así, también se relajará tu interlocutor.

Siéntate derecho: sentarse de esta forma es un indicador de seguridad, entonces asegúrate de sentarte derecho, especialmente en reuniones. Se sugiere mantener los abdominales apretados ya que al estarlo, es imposible dejar de estar derecho. Una vez que se tengas los abdominales contraídos, relajar los hombros.

Párate derecho: la misma idea anterior, tu postura dice mucho de ti y no quieres de decir “estoy inseguro de mí mismo”. En general, pararte con los pies demasiado juntos indicaría inseguridad, mientras mayor distancia entre los pies indicaría mayor confianza. La regla general es mantener los pies separados por el ancho de la cadera.

Cuando entres a algún lugar, saluda a alguien y sonríe: los seres humanos somos animales sociales, a un nivel inconsciente, somos más agradables para otros cuando demostramos que ya estamos familiarizados con otras personas.

Fuente: Inc.com

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